Eres un puerto inseguro
Eres un puerto inseguro despedazado por el oleaje,
un cenicero quebrado.
El hambre a media noche que hace engordar.
La ceniza que se adhiere en fuga y desaparece.
Un paseo tablado donde los borrachos orinan
y adolescentes ingenuas se enamoran.
A veces eres una selva talada,
en otras ocasiones un Amazonas
aparece de improvisto para sorprenderme
y me sorprendes.
Eres el bote que llegando a la orilla encalla
y pierde su pesca.
Tus brazos son los postes de luz
que los niños revientan en las noches.
Tu sonrisa es como un tendido eléctrico
donde cuelgan zapatos.
Un abrazo tuyo me recuerda a la superficie del cartón
blanda y áspera.
No recuerdo si cuando bailas una feria
se convierte en el escenario o si te conviertes
en un primate menos desarrollado.
Eres, en efecto, un puerto inseguro
y no sé por que ansío tanto el arribo.
Son las once de la noche
Son las once de la noche
y el viento está quieto en la sombra,
un disparo impenetrable
reduce la isla a escombros,
los gusanos refulgen ácidos en la memoria,
un fragmento de mi cuerpo ha muerto
y lo siento en la espina dorsal,
como lo sienten los años
atrapados en los ciclos del retorno.
Los labios no escriben las palabras
las pronuncian con indiferencia
cuando se anegan muy adentro en las costillas.
El abandono ha hecho mella en el desconcierto
y tu cuerpo es el rumor de una foto robada
sumergida en lo profundo…
Un lunar
Un lunar se trafica con el tiempo,
como ese espacio bajo la espalda,
mapa breve que se resume
en la palma de la mano,
minúsculo anillo de un pozo
agrietado en el desierto de la lengua;
el límite que alcanza su frontera
es un puerto aislado,
y saltan las algas que le esconden
como piedras incineradas
sobre el borde de la fisura.
Por los poros de la ciudad
anda errante el signo
de su guarida,
un acueducto mohoso
es el acopio
de los ojos…
2 comentarios:
Muchas gracias Abdiel por tu visita a mi blog, siempre es un honor recibir crítica de personas como tú, a quien vengo admirando hace tiempo. Y creo que lo he escrito ya aquí, esto es exquisito! Saludos.
se rompió el babillometro...
Publicar un comentario